Esto marca oficialmente 2 meses en la gran #cdmx. Yay. yay?.
Originalmente
planeaba escribir esto al cumplir el primer mes. Pero en ese momento no
solo hubiera sido una nota trágica sino probablemente hubiera terminado
conmigo regresando a casa, maleta en mano y ciento volando.
La realidad es que todavía es muy probable que eso suceda.
Mentalmente estoy más estable que hace un mes. Monetariamente no.
Si
bien algunos gastos se han compensado. En su gran mayoría han aumentado
de manera exponencial haciendo que mi cartera lo sufra (y mi paz
financiera este al borde un colapso y a un contrato de deuda a largo
plazo con mis padres). Aunque también he pensando en modos de vida mas
"alternativos" para compensarlo (siendo la opción mas viable es
conseguirme una pequeña "little black book").
En
ocasiones pasadas la ciudad me parecía una urbe cosmopolita, donde se
es más libre (en casi todos los aspectos) que en provincia, donde las
horas no tienen fin y se convierten paulatinamente en un nuevo día.
Donde la gente ríe a las 4 de la mañana por todos lados y donde cada
esquina tiene un viejo sueño arquitectónico convertido en paisaje. Si
bien, es una descripción adecuada, solo lo es para ciertos barrios de la
ciudad. El resto de ella es un monstruo de mil cabezas, acalorado y
harto de las masas de gente que viven y se mueven en su interior, sin
dejar nada más que una cara de hastío y un dolor de cabeza. Los estratos
sociales y económicos se vuelven evidentes y son escupidos directamente
en nuestra cara, no en son de reclamo pero en son de majadería común y
corriente y una "chingadera" más. El monstruo termina por entrar dentro
de nosotros, haciéndonos uno con él. Una simbiosis amorfa y
desagradable.
Si bien a mayor tamaño, mayores
oportunidades, las posibles ofertas de esta ciudad parecen deslizarse
de entre mis dedos; O yo no fui creada para este lugar o este lugar
nunca planeó tener una carrera para mí. Si bien apenas son 2 meses y
muchos otros antes que yo sufrieron/batallaron/lucharon durante más
tiempo antes de establecerse, yo he perdido el foco y creo que esta es
una de esas batallas perdidas. Una batalla perdida en la que tengo la
oportunidad de hacerme un harakiri o luchar hasta ver el cañón en la
cara y morir (porque, queridos, como lo he descubierto. Mi orgullo es mi
más grande debilidad). "Uno pierde las batallas pero no la guerra" (ini
pidi las batallis piri ni la guerra), eso es cuando sabes cual es la
gran guerra, el gran propósito de lanzarse a la muerte por el bien
mayor, común o propio. Pero ya he perdido la razón de ser de todo esto y
así es como uno termina odiando a todo mundo, odiándose a si mismo,
pero con el patriotismo por delante (cof perdonUSA cof).
El
detalle con esta batalla es haberla iniciado con altas expectativas. Si
bien me lo prometí, no volver a iniciar un año calendario con
expectativas o planes y mejor dejar que la vida me sorprendiera; hacer
cambios tan drásticos implicaba hacer al menos uno o 2 planes a corto e
inmediato plazo (dejando mi mente flotar a la deriva, "daydreaming" y
bien, haciendo expectativas improbables, increíbles e inconcebibles).
¿Y la vida por qué no viene con Google Maps? |
Ahora
que ya hice el primer paso y me mude a esta urbe, no me queda más que
"sobrevivir". Si bien suena dramático, la realidad de las cosas es que
ya no me queda mucho que hacer. Mi sueño esta hecho y lo que no esperaba
es encontrarme con la cartera vacía y con ella, mi cartera de
motivaciones y sueños, también vacía. No sabia que esperar después, que
quería para después. Solo hice lo que había pendiente en la lista y
ahora que fue completado me encuentro con un montón de puntos "to do",
una pluma y sin nada que escribir. Dibujar si (oh si). Pero... ¿y ahora
qué?
0 comentarios:
Publicar un comentario